El mensaje de la Semana – Rosh Hashaná 20
Shalom a todos!
En momentos en que el año está por culminar es difícil ignorar el sentimiento de impresión que nos embarga. Estábamos acostumbrados a otro tipo de año. Este se salió completamente de la norma. Todo cambió. En Rosh Hashaná del año pasado, nadie soñaba con lo que llegaría a nuestras vidas. Sabíamos que en esos días de entre Rosh Hashaná y Yom Kipur se fijaría la suerte de todos los creados para el año que empezaba y muchos más por venir, pero confiábamos que el mundo seguiría su curso, ese al que nos habíamos acostumbrado. No faltaban las quejas de lo que nos parecía que debería cambiar, pero no soñamos que hubiera un cambio tan drástico hasta el punto de llegar a sentir nostalgia por el mundo de antes del corona.
Mientras el año pasado hubo quien nos llamó la atención al mensaje que se veía en las letras del año 5780, que sería uno en el que el engreído hombre del 2020 tendrá que aceptar que no sabe, diciendo las palabras “no sé”, este año hay quien lee en sus letras que “Meashpot yarim evion” (la palabra Meashpot, que quiere decir “de basureros”, tiene las mismas letras de este año que comienza y yarim evion quiere decir que Hash-m levanta al pobre). Que en este año Hash-m levantará a su pueblo de niveles tan bajos, que son comparados con basureros. El deseo ferviente es, que esto se cristalice con la salida inminente de nuestro pueblo de la penosa ignorancia y lejanía que sufre su gran mayoría, desafortunadamente. Como es sabido, el primer paso para salir de la ignorancia es aceptarla. Si el año que termina fue uno en el que tuvimos que aceptar que no sabemos, pareciera entonces apropiado, que en este nuevo ameritemos salir de esos ashpot-basureros de la ignorancia.
Se ha escrito mucho sobre un Rosh Hashaná como el de este año, que su primer día no tiene el toque del Shofar. Una de las explicaciones que se dan para la Mitzvá del Shofar es, lo que dice en el versículo en Shir Hashirim que “La voz de mi amado toca (llama), ábreme…”. Nuestras escrituras conectan este tocar a la Mitzvá del Shofar, a través de la cual el Creador llama a Israel a que abra las puertas de su corazón para permitirle entrar. El Shofar es un tocar de puerta que hace nada menos que Hash-m pidiendo entrar al corazón de cada uno de los benei Israel. La idea es impresionante.
De acuerdo a lo escrito anteriormente, pareciera que la razón de porqué este año no tenemos la Mitzvá de Shofar en el primer día de Rosh Hashaná es, que este ha sido un año de constante llamado. La llamada de atención que ha constituido este virus agresivo, que desde su aparición no ha parado de sembrar nervios, miedo e incluso pánico por su alto contagió y sus peligrosas consecuencias, tantas veces incluso mortales, Hash-m yishmor. Con un llamado así, solo un insensato sigue apático.
Este año que termina el Shofar ha estado sonando desde Purim. La esperanza es que escuchemos el llamado. El Creador está tocando la puerta. Solo pide que abramos la puerta de nuestro corazón para recibir así lo más elevado que puede experimentar un individuo en su vida, dando “alojamiento” en su corazón a la Presencia Divina, llenando su vida con bendición y alegría que, seguramente estarán como primeros pedidos para este año que comienza.
Que sea este un Rosh Hashaná en el que logremos todos escuchar ese insistente llamado. Para nuestro verdadero bien y el de toda la humanidad.
Les desea sinceramente,
Daniel Milhem.